Núñez Feijóo
sueña con las próximas elecciones gallegas que debe adelantar o dejar que sea
marzo 2013 quien sentencie. Ambas posibilidades son malas y no sabe qué hacer;
para eso es amigo de Mariano Rajoy y todo se contagia.
Ahora el
Parlamento Gallego está totalmente troceado en dos. El PP tiene 38 diputados y
la suma del PSOE más BNG tiene 37. Situación que no se volverá a repetir, a
poco que se empeñen en ello tanto el PSOE, como el BNG o el nuevo SCD de Mario
Conde. Es tan poco el límite que separa el éxito del fracaso, que los miedos se
multiplican.
Saben todos
que las elecciones en Galicia no pueden ser más que el 21 de octubre o en marzo
2012, no hay término medio pues nadie entendería un proceso electoral a las
pocas semanas del de el País Vasco. Pero hacerlo ahora supone no llegar a los
tejemanejes de modificar el número de diputados para dar más importancia a Lugo
y menos a las ciudades industriales. Algo que hasta ahora le venia bien al PP
pero con la irrupción del partido de Mario Conde se le está volviendo en su contra,
a poco que los disidentes del PP sigan apoyando al SCD, como ya parece seguro.
Es cierto que
en estos momentos toda la oposición al PP está descolocada e incluso
descabezada, algo que parece bueno para el PP; pero nada une más y de forma
rápida, que la convocatoria de unas elecciones. De hacerlo, en pocos días
aparecerán resueltas las dudas del BNG, del candidato posible del PSOE o del
Congreso que de la salida al SCD. Lo saben en el PP, como saben que Mario Conde
se presentará en Galicia, incluso aunque se convocaran mañana por la mañana las
elecciones. Es el único punto de apoyo de Mario Conde para hacer palanca en
España. Si fracasa en Galicia o no se puede presentar, desaparece su intento
segundo por ser algo o alguien en política.
¿Se unirían
el PP al SCD en sus escaños para que no gobernaran PSOE más BNG?
¿Qué pediría
a cambio Mario Conde? ¿cómo afectaría esto al PP en sus posibilidades electorales
de España? ¿Logrará presentar un candidato creíble el PSOE? ¿Qué queda dentro
en el BNG? ¿se presentarían por separados los cabreados del BNG y lograrían
representación? No me extraña que Núñez Feijóo no logre dormir bien.