Ayer alguien en Antena3 debería haber frenado la noticia, haber escondido al guionista del telediario de las 9 de la noche, aunque fuera estudiante en prácticas. Tras la detención de cuatro terroristas del Grapo en Andalucía aunque vivían en Francia, dos de ellos fueron puestos en libertad en 24 horas por el juez.
Aquello nos pareció una barbaridad a todos, más a la familia zaragozana de Cordón, que no entendía nada, pero que enseguida fue llamada por el juez a una reunión para informarles de su decisión, tras la que la familia seguía reclamando justicia pero con menos vehemencia.
El juez en otra equivocación más en esta larga historia, añadía que iba a investigar a los que habían filtrado a la prensa detalles que obstaculizaban la investigación, sobre los nombres de los terroristas y su puesta en libertad.
¿Dónde se equivocó Antena3? Pues ayer va toda ufana, convencida de que tenía una buena noticia, y nos cuenta con imágenes del presunto terrorista saliendo de una reunión o de la cárcel o de vete a saber de qué lugar, que en el año 2006 el mismo terrorista ya había sido detenido y puesto también en libertad a las pocas horas de su detención y por el mismo juez.
Jodo el error, para ser un medio de comunicación serio, con muchos años en sus espaldas, que debería conocer perfectamente la historia del Grapo, sus sombras y dudas, y que antes de emitir este tipo de noticias debería haberlas escuchado, simplemente escuchado en voz alta como cualqueir televidente con años de edad y ponerse a pensar.
Matías Prat no se inmutó, pues solo lee lo que le dicen, pero su profesionalidad debía ser suficiente para que le hubiera entrado tos o mala gana. Eso, o simplemente es que yo soy tonto de baba, otra vez. Jodo qué día llevo, ya soy tonto por dos veces en el mismo día.