Otra rueda de
prensa de Rajoy mal realizada, mal asesorada. Mal, muy mal iluminada, corta y
escasa, mal trabajada.
Delante de una ventana y con escasa iluminación cuando la cámara se acercaba y que ponía en penumbra a un Presidente sonriente que trasmitía una sonrisa falsa, que resultaba a veces patética incluso pues no acompañaba lo que decía con sus gestos de naturalidad.
Delante de una ventana y con escasa iluminación cuando la cámara se acercaba y que ponía en penumbra a un Presidente sonriente que trasmitía una sonrisa falsa, que resultaba a veces patética incluso pues no acompañaba lo que decía con sus gestos de naturalidad.
¿Dónde estaban
los asesores de imagen para cuidar la iluminación?
Tras la nula
presencia suya ayer en la presentación de la decisión surgieron con fuerza su
presencia, lógico e inevitable, más cuando se supo que hoy se iba a ver el fútbol
a Polonia. Ante la pregunta sobre este asunto hay respondido con otro error,
anteponiendo no solo el fútbol sino también el tenis, como asuntos que debería
ver hoy domingo. Y avisando que haga lo que haga se entenderá mal. No, se entenderá mal si lo haces mal y lo explicas peor. No tienes que ir a Polonia, entre otros muchos motivos por la situación de crisis de hoy, por que los españoles que sufen la crisis no pueden ir a Polonia, por el coste de ir a Polonía a ver un partido de fútbol, por que tu obligación es demostrar que la responsabilidad hoy es estar en España.
Como muy bien
anunciaba yo en el post de ayer, esto es abrir una cuenta de crédito a España,
con todo lo positivo y negativo que esto tiene. Y es lo que habría que explicar
a los españoles. Qué es una cuenta de crédito, para qué sirve, como se paga,
qué problemas tiene. Pero hemos caído otra vez en la manipulación verbal con
eufemismos para no explicar, para no hacer pedagogía ante los ciudadanos. Así
es imposible que las personas crean, confíen, dejen de tener miedo o de apagar
la información. Si el PP se cree que las ruedas de prensa se dan para callar a
los periodistas se equivoca de un sistema muy bueno para lograr complicidades
sociales.
Volvemos a
equivocarnos en la comunicación y os juro que España dispone de excelentes
comunicadores y técnicos en comunicación, pero o no los contratamos, o no les
hacemos caso o tienen miedo a decirle al líder lo que debe y no debe hacer. Mal
camino, con la que está cayendo y lo que nos espera por caer.