Hay “otras”
medidas posibles para resolver los actuales problemas económicos y sociales de
Europa. Pero no les interesa tomarlas a los poderes que han provocado la actual
situación. No se trata de que nos veamos obligados a tener que tomar una medida
muy dura de recorte, es que simplemente no quieren buscar y decidir otro tipo
de medidas, pues les afecta negativamente a los que las tienen que tomar. Es
así de sencillo y de complejo. Los que toman las decisiones tienen unos poderes
que cuidar, unos intereses personales que mimar, unas realidad desde las que
vienen y por las que han sido puestas en los lugares de poder que ostentan.
1/ Evitar
fraude fiscal con más medidas contundentes de pago en efectivo (500 euros
máximo para todo tipo de transacciones). Fiscalidad europea común. Cerrar
paraísos fiscales al acceso desde Europa y combatirlos legalmente con medidas
europeas. Control total de los servicios sin factura. Desaparición de precios
SIN IVA en todos los lugares que se indique. El precio siempre será final.
Desaparición del billete de 500 euros. Control de las SICAV en toda Europa.
Revisar política común en importaciones y exportaciones.
2/ Lentificar
el acercamiento a las cifras de déficit público, acordado para los países con
dificultades. Para poder pagar a los deudores hay que buscar fórmulas
“posibles” o será inevitable el fallo en el pago. Excepto que sea eso
precisamente lo que busquen. Control de los intereses a pagar con diversas
medidas públicas.
3/ Crear los
Eurobonos y que el BCE intervenga en la economía de mercado, para que no se vea
dominada por especuladores financieros privados. Menos laboratorios de dinero,
más respeto a las personas.
4/ Tasa Tobin
a transacciones, más impuestos a los bancos y grandes fortunas, más impuestos
de todo tipo a la economía NO productiva. Impuesto de sucesiones. Diferente
fiscalidad para beneficios empresariales repartidos o reinvertidos.
5/ Más
formación continua, educación de más calidad y exigencia, I+D+i como elemento
fundamental para crecer. Buscar la excelencia en Universidades y potenciar su
integración con proyectos empresariales, sean públicos o privados. Las empresas
privadas deben integrarse más en esta formación de calidad.
6/ Crear Agencias
europeas de rating, que sean las que controlen los mercados y marquen los
puntos de conflicto. Poner en respeto al Euro e intentar que se integren más
países para que sea más potente.
7/ Banca
pública europea para movilizar los créditos hacia los emprendedores, con
conceptos diferentes de capital riesgo. Control de la banca desde los poderes
públicos. Fusiones europeas de entidades bancarias.
8/ Contrato
de trabajo (casi) único. Restructuración del sistema laboral, control
exhaustivo de las horas extraordinarias. Jubilación con 40 años cotizados.
Contratos para la integración desde la FP y la Universidad. SMI de 1.000 euros.
Pensiones y desempleo entre SMI y el doble del SMI.
9/ Reordenación
de la administración. Más financiación hacia los Ayuntamientos con mucho más
control en las inversiones faraónicas. Desaparición de las Diputaciones y el
Senado. Revisión del papel de Consejos de Estado y similares. Modificación del
sistema electoral, con circunscripción en la Comunidad Autónoma y más
proporcionalidad. Control e instauración diferente de la financiación política
y sindical.
10/ Modificar
desde varios frentes una mayor implicación social de las personas con sus entornos,
para crecer en participación y responsabilidad social. Facilidades y
abaratamiento de costes púbicos para voluntarios y afiliados a organizaciones
sociales, en distinto grado según su implicación, para que resulta más
gratificante ayudar y cooperar.
11/ Crear
puestos de trabajo de manera urgente. En estos momentos lo más importante es
lograr que más personas trabajen, sean útiles, se integren en una sociedad
productiva, crean en el valor de la formación, creen sociedad. Con un 52% de la
población joven sin poder trabajar, el peligro de estallido es muy real y será
cuestión de tiempo. No ver este peligro es de complicado entendimiento. El
tiempo juega en contra de la situación de forma muy urgente.