Al PSOE de Rubalcaba le ha hecho la cama el PP de Rajoy con la aprobación de las reforma laboral, que es más es una vuelta a 1970 que otra cosa. Rubalcaba ha cogido aire y presto, ha acudido a La Moncloa a darle la gracias a Mariano. Nunca se hubiera imaginado que tras perder incluso el norte y la sal, la fuerza y las ganas, le iban a regalar tamaño motivo para salir como defensor de los trabajadores.
Por cierto, incluso son muchos los trabajadores que votaron al PP y que ahora, jope, están sacando cuentas de cuanto les va a costar su voto a Mariano Rajoy si los despiden, que puede que sea que sí, pues con más de 10 millones de contratos firmados cada año, la renovación del tejido laboral en España es vergonzosamente muy alto, incluso en periodos de crisis de actividad tan brutal.
Rubalcaba saca ahora a Soraya Rodríguez como novedad dura contra el PP, para hacernos creer que ellos son guay del Paraguay y vienen de nuevos a tenerse que chupar estos desastres. Yo creo que es tan dura la reforma laboral, que debemos entre toda la izquierda que ponernos de acuerdo para no capitalizar de momento nada que no sea explicar a la sociedad lo que realmente es esta patada en los riñones, y esperar que no se abuse de ella en los próximos años, hasta que algún inteligente político sea capaz de retornar a la senda construida entre trabajadores y empresarios tras 3 décadas de peleas, con mucho sudor y bastantes huelgas.
Claro que había que reformar el mercado laboral, efectivamente lo debería haber realizado un Zapatero dormido y asustado, y así no habría que soportar estos desastres. No duda de que las actuales normas laborales, la excesiva diferencia entre trabajadores con contrato indefinido y el resto, era una vergüenza consentida que dejaba con menos derechos a los que terminaban en el desempleo y ya nunca más tenían un contrato fijo. Pero de aquellos lodos hemos llegado a estos desastrosos resultados en donde todo se ha mezclado hasta formar una masa gris y sin derechos, en donde ni los jóvenes de 2012 podrán compararse en derechos a los que tenía yo en 1970 (si, con el “Enano”) cuando empecé a trabajar. Ni entonces ni ahora podías acudir al sindicato. Entonces por que lo dirigía tu mismo jefe. Hoy por que no puede hacer nada más que mirarte con preocupación ante un contrato que tiene un año de periodo de prueba. ¿Hay algo con menos derechos laborales, que estar un año en periodo de prueba? Si, el día 364 ya estarás despedido.