España es un gran país de voluntarios y cooperantes, el número de personas que ayudan voluntariamente en múltiples facetas de la vida pública, asistencial, cultural, política, sanitaria, de acompañamiento, en seguridad, en educación o en múltiples tareas es muy importante y numeroso. Su innegable labor y su entrega no debe tener ninguna crítica.
Pero existen los peros, sobre todo en periodos de crisis grave en el empleo y cuando se observan algunas manipulaciones de malos políticos que encima quieren emplear a los voluntarios para cubrir puestos de trabajo que se deberían cubrir con personas desempleadas y que así podrían disponer de un sueldo digno. Y me estoy refiriendo directamente a la Alcaldesa de Madrid, pero me consta que sucede en otros casos, cuando se quiere recurrir a voluntarios para cubrir servicios que no deben ser gratuitos.
Por ley está prohibido que un voluntario ocupe el puesto de trabajo que debe realizar una persona retribuida por ello. Pero esta realidad se salta a la torera muchas veces, pues el trabajo voluntario ocupa una actividad que de no hacerse por ellos, se tendría que realizar pagando. Trabajo inmenso del que nos beneficiamos todos, pero que ni valoramos en su realidad ni somos capaces de entender que se debería pagar más impuesto para ser cubierto por trabajadores remunerados, pues los beneficios son para todos.
Los voluntarios con cooperantes altruistas y solidarios, y nunca deben sustituir al trabajo, pues sería competencia desleal. Nunca debe ser mano de obra gratuita o barata y tal vez en estos momentos de grave desempleo nos debemos todos que replantear hasta donde deben llegar los voluntarios y hasta donde la contrataciones para momentos críticos, pagadas entre todos, para dar servicios imprescindibles a la sociedad, soportados por los que más tienen y no con el trabajo gratuito de los que más corazón entregan a los demás.
No planteo el control nuevo sobre el trabajo de los voluntarios, simplemente que no sean utilizados por algunos “listos” de libro capitalista barato. Por cierto, creo que sería bueno crear el carnet o acreditación oficial de voluntario, que permitiera el acceso a ciertos lugares públicos de cultura y formación con algunas ventajas con respecto a las personas que no entregan nada de su tiempo a la sociedad que les envuelve y del que muchas veces y sin darse cuenta, se aprovechas.