Zapatero sigue sin explicar a los españoles qué está sucediendo en una España en alerta. Él sabrá los motivos, los demás los observamos con sorpresa y curiosidad si no con temor de que en realidad ya no esté de Presidente del Gobierno “de verdad”, sino que ahora quien gobierna y gestiona es Rubalcaba y sus ministros. No se entiende de otra forma, pues en momento
hasta ahora únicos en la historia de la democracia en España, que no salga el Presidente del país a explicar sus decisiones es de complejo entendimiento político, más si cabe, por venir su ausencia desde un partido y un Gobierno que se debería llamar de izquierdas y por ello estar más cerca de los ciudadanos. Tal vez derrotado ya, tal vez quemado y agotado, tal vez lleno de angustian y ansiedades, prefiere incluso no dirigirse en el Congreso a los diputados que deben aprobar sus medidas de extensión del Estado de Alarma.Él mismo se da por derrotado, y de ser así, lo lógico incluso sería que dimiera, pero cuando menos que convocara elecciones anticipadas, algo que parece imposible de pensar, pues se piensa más en los resultados muy malos que en el funcionamiento del país. Por cierto, hay una fecha muy cómoda para la economía del Estado. Unir las elecciones generales con las municipales y autonómicas. Algo que podría convenir al PSOE en algunas zonas, no en otras, pero que rebajaría gastos electorales de forma importante y tensiones en meses que se prevén complejos.