Estamos en crisis, en una crisis económica tremenda. Pero no todos los españoles están en crisis, muchos de ellos ni se han enterado de esta crisis, sin contar los que incluso están saliendo reforzados de ella, aprovechando los recovecos, los negocios que toda crisis económica crea.
La crisis económica la están padeciendo los parados, las rentas más bajas, los trabajadores de pequeñas empresas, los autónomos. En suma, las personas con rentas más bajas y las clases medias bajas.
Nuestro sistema de bienestar no es igual al de nuestros países vecinos. Es menor. Tanto en sanidad como en educación o pensiones, por mucho que se diga lo contrario, estamos en peores números que Europa, que la media de la OCDE. Pero nuestra carga fiscal es también menor.
Durante muchos años hemos dicho, han dicho los políticos en este país que había que bajar impuestos, cuando nuestra carga fiscal es de las más bajas de Europa, de occidente. No es compatible y menos en periodos de crisis, la bajada de impuestos con mantener el estado de bienestar. Y menos si quien dice este discurso es aparentemente de izquierdas. Pero como es lógico, no se trata de subir la carga fiscal por igual, a todos los ciudadanos.
No hay mejor sistema de reparto de la riqueza, de distribuir las crisis, de controlar los gastos sociales para que sean mejor repartidos, que subiendo impuestos de forma proporcionada a los ingresos. Y sobre todo controlar el fraude.
No es lógico como se dice por muchas personas, la desaparición de ciertos impuestos a la riqueza. No lo es tampoco, la forma de pagar impuestos de las grandes fortunas o de las SICAV. Se dirá que representan poco número, cierto, porque muchas de ellas se escapan al control fiscal. Los impuestos son para trabajarlos y reorganizarlos. Hay muchas familias y/o personas con elevados ingresos que se escapan de las cotizaciones, léase profesiones liberales, gran parte del turismo y servicios, atención a personas dependientes, trabajos de rehabilitación de viviendas. Y los culpables son primeros los que lo hacen pero segundo los que lo permitimos al no solicitar facturas Y por fin los gobiernos que no legislan para que sea obligada la solicitud de la factura.
Hay que subir los impuestos en España, y la izquierda es la que debe liderar este proceso.
Y enseñar a la sociedad que los impuestos bien redistribuidos crean riqueza y a la vez es la mejor garantía para el sistema social que nos hemos entregado. No es cieto que contra menos imuestos más se recauda. Es una falacia de la derecha que no quiere impuestos porque ellos ya tienen asegurado su sistema de bienestar. Que se lo pregunten a Europa si no.