Dos nuevos conceptos a los que tendremos que ir prestando más atención para los que tenemos algo que ver en la educación de niños y niñas.
Slow Parenting y Simplicity Parenting
Durante excesivos años hemos sometidos a los hijos a una sobreprotección en la educación, a un aumento constante en cursos, actividades preescolares, cuidados extremos en la salud, alimentación, formación, compañías.
Pero los resultados han dido malos. De nada o de muy poco han servido todos estos cambios casi antinaturales y obsesivos en la educación de los hijos. Leen menos, son más violentos y menos respetuosos con los adultos, hablan peor, el fracaso escolar es una constante, son adictos a actividades poca naturales, consumen impetuosamente y sin controls, no saben lo que es el trabajo ni el dinero que se gana con exfuerzo y no quieren la emancipación hasta los 35 años.
No les hemos dotado de herramientas para su crecimiento natural. Para que sean ellos mismos los que encuentren las respuestas a los problemas que da la vida.
Las madres patas (las hembras de los patos o de las aves en general), expulsan a sus pollos desde una cierta altura al agua de los ríos para que aprendan a defenderse de las corrientes. No hay otro sistema mejor para la perpetuación de su especie.
Todos tenemos que aprender por nosotros mismos, pues el resto de hábitos no serán asumidos como propios.