Antes que cualquier conflicto es siempre recomendable un aceptable acuerdo. Las situaciones en Figueruelas no son buenas y sin tener que ceder en todo lo que planteaba la empresa, los sindicatos están demostrando una responsabilidad altísima para llegar a acuerdos complicados de asumir.
Que no nos quepa duda a todos los aragoneses que los sindicatos que trabajan dentro de GM y las personas que los representan en las mesas de negociación son unos excelentes profesionales de la negociación, esta vez muy compleja.
Aragón necesita a la GM y la GM necesita la planta de Figueruelas para seguir siendo una empresa viable. EStaban condenados a entenderse.
Esta vez si, el Gobierno de Aragón ha estado rápido y eficaz.
