Es posible que los estados algún día, sepan valorar que los mercados pueden hacer matrimonios nada interesantes para su futuro. No todo lo que hace el mercado es bueno para la economía de los países aunque lo sea para la economía de las empresas, luego es obligatorio ser más estrategas y saber cuidar aquellas compañías imprescindibles para el futuro a medio plazo de los países.
Durante décadas hemos caído en la trampa de la privatización, sin darnos cuenta que era liquidez que coneguía el Estado para nivelar sus cuentas.
Pan para entonces, hambre para el futuro.
GM ha decidido sopesar (el gobierno de EEUU más bien) que vender Opel a empresas controladas por capital ruso es peligroso porque abre líneas de investigación industrial que han costado muchos años de trabajo.
No es inteligente.
No se sabe qué se hará, no se sabe qué camino deberá tomar la nueva economía que surja tras esta gran crisis, pero o cuidamos con inteligencia nuestros activos de investigación o perderemos la batalla del medio y largo plazo.
Durante décadas hemos caído en la trampa de la privatización, sin darnos cuenta que era liquidez que coneguía el Estado para nivelar sus cuentas.
Pan para entonces, hambre para el futuro.
GM ha decidido sopesar (el gobierno de EEUU más bien) que vender Opel a empresas controladas por capital ruso es peligroso porque abre líneas de investigación industrial que han costado muchos años de trabajo.
No es inteligente.
No se sabe qué se hará, no se sabe qué camino deberá tomar la nueva economía que surja tras esta gran crisis, pero o cuidamos con inteligencia nuestros activos de investigación o perderemos la batalla del medio y largo plazo.