En esta Europa de principios del siglo XXI (lo escribo en el año 2008) faltan líderes políticos con categoría de estadistas, capaces de liderar a una Europa en construcción, capaces de resolver crisis y tener personalidad para transmitir serenidad y abrir nuevos caminos en la historia.No voy a poner líderes viejos para comparar, pues siempre resulta odioso, pero creo que todos debemos plantearnos en algún momento, que en vez de votar a siglas, debemos elegir cuando se nos solicite nuestra opinión, a personas capaces de liderar grupos, de tener ideas nuevas, de ser capaces de gestionar la historia.
Hartos muchos europeos de votar a siglas que esconden a medianías, recurren a la abstención mientras los problemas siguen sin resolverse. O lo que es peor todavía, a negros políticos demagogos de verbo fácil, que trabajar para grupos de presión escondidos.
Los grandes partidos europeos, deberían relanzar la Unión Política en Europa, y que esta fuera liderada por estadistas capaces de insuflar al menos ilusión. Una vez que ha fracasado la Unión Económica, también la Unión Constitucional, se debe intentar buscar la Unión Política, la más complicada de todas, pero la única que queda por explorar.
