El logotipo que están viendo a su izquierda es el mismo que están asumiendo ahora millones de americanos del norte en sus ordenadores, en sus televisiones, en cartas que les llegan a sus buzones.
Se trata de conseguir que este logotipo entre en la mente de todos los americanos, para que el día de las votaciones sea parte de su propia forma de pensar, sea este mensaje de texto y color el que le ayude a decidir.
Crear este logotipo es labor de grandes diseñadores, de personas que se juegan su prestigio y que ayudan a ganar o a perder, a vender un producto o a no venderlo.
Ya se que soy un auténtico revirado en mis análisis, lo se, como se que los mensajes subliminales existen y se utilizan para bien o se cometen los errores de no tenerlos en cuenta, para mal.
Leamos el logotipo.
Con calma.
¿Quien es el mayor enemigo de todos los americanos en estos momentos?
Si, me estoy refiriendo a ese.
Cambien la B por una S
Ahora vayamos con los dos apellidos.
Uno formado por las dos primeras letras y que continua con las tres últimas.
No, no es un ejercicio de diablos, de demonios que escriben torcido, es un error gráfico de un bobo.
Sin querer, este mensaje entrará en los cerebros americanos para asentarse en una zona herida.
¿Tan difícil era haber puesto sólo Barack & Joe?
No puede ser que un diseñador aragonés medio tonto (yo), se haya dado cuenta de esto a las 17 horas del viernes y los americanos que cobran un riñón por diseñar, no se hayan dado cuenta.
Se trata de conseguir que este logotipo entre en la mente de todos los americanos, para que el día de las votaciones sea parte de su propia forma de pensar, sea este mensaje de texto y color el que le ayude a decidir.
Crear este logotipo es labor de grandes diseñadores, de personas que se juegan su prestigio y que ayudan a ganar o a perder, a vender un producto o a no venderlo.
Ya se que soy un auténtico revirado en mis análisis, lo se, como se que los mensajes subliminales existen y se utilizan para bien o se cometen los errores de no tenerlos en cuenta, para mal.
Leamos el logotipo.
Con calma.
¿Quien es el mayor enemigo de todos los americanos en estos momentos?
Si, me estoy refiriendo a ese.
Cambien la B por una S
Ahora vayamos con los dos apellidos.
Uno formado por las dos primeras letras y que continua con las tres últimas.
No, no es un ejercicio de diablos, de demonios que escriben torcido, es un error gráfico de un bobo.
Sin querer, este mensaje entrará en los cerebros americanos para asentarse en una zona herida.
¿Tan difícil era haber puesto sólo Barack & Joe?
No puede ser que un diseñador aragonés medio tonto (yo), se haya dado cuenta de esto a las 17 horas del viernes y los americanos que cobran un riñón por diseñar, no se hayan dado cuenta.