Las cuentas del Estado en España, entran en déficit, lo cual no es una verdad total. Pero hay que ser exigente eso si, sin caer en el miedo y el desánimo.
En principio decir que se entra en déficit en una contabilidad analizada de 6 meses, es un dato real pero que en principio no es preocupante por si misma. Simplemente se está gastando más de lo que se ingresa, porque se está ingresando mucho menos.
Este dato es enjugado por los saldos positivos de otros periodos.
Pero además es erróneo, pues la Seguridad Social en el mismo periodo obtuvo un saldo positivo alto.
El peligro es que no nos lleve a una situación larga en el tiempo, pues haría obligatorio tomar medidas de reducción drástica del gasto público y con ello un enfriamiento mayor de la economía.
En teoría estos ciclos se retroalimentan ellos solos, y en la mima medida que se dan hacia abajo, ellos solos suben por la inercia de los repuntes lógicos y por la medidas que se toman, siempre que no existen acciones inasumibles en al contexto internacional, como podría ser en este caso, un desabastecimiento de energía o una entrada en el mercado del consumo de grandes cantidades de ciudadanos nuevos, lo que encarecería los productos y el empobrecimiento de los que hasta ahora tenían acceso a esos bienes.
En realidad los dineros en circulación son siempre los mismos, los números totales y reales. Si un grupo de países se vuelven más pobres es porque otro grupo de países se vuelven más ricos. Eso no quiere decir que los que se vuelven más ricos lo hagan de una menera distributiva correcta entre su sociedad, bien al contrario en los primeros estados de riqueza, sólo alcanza esta a las clases dominantes.
Estamos pues a un paso de que más personas y no países, se hagan ricas o riquísimas a costa de muchas personas de clase media que teniendo lo mismo, van a poder comprar menos.
Los nuevos ricos serán chinos, indios o de Qatar mientras que los nuevos pobres serán españoles, italiano o argentinos.
En principio decir que se entra en déficit en una contabilidad analizada de 6 meses, es un dato real pero que en principio no es preocupante por si misma. Simplemente se está gastando más de lo que se ingresa, porque se está ingresando mucho menos.
Este dato es enjugado por los saldos positivos de otros periodos.
Pero además es erróneo, pues la Seguridad Social en el mismo periodo obtuvo un saldo positivo alto.
El peligro es que no nos lleve a una situación larga en el tiempo, pues haría obligatorio tomar medidas de reducción drástica del gasto público y con ello un enfriamiento mayor de la economía.
En teoría estos ciclos se retroalimentan ellos solos, y en la mima medida que se dan hacia abajo, ellos solos suben por la inercia de los repuntes lógicos y por la medidas que se toman, siempre que no existen acciones inasumibles en al contexto internacional, como podría ser en este caso, un desabastecimiento de energía o una entrada en el mercado del consumo de grandes cantidades de ciudadanos nuevos, lo que encarecería los productos y el empobrecimiento de los que hasta ahora tenían acceso a esos bienes.
En realidad los dineros en circulación son siempre los mismos, los números totales y reales. Si un grupo de países se vuelven más pobres es porque otro grupo de países se vuelven más ricos. Eso no quiere decir que los que se vuelven más ricos lo hagan de una menera distributiva correcta entre su sociedad, bien al contrario en los primeros estados de riqueza, sólo alcanza esta a las clases dominantes.
Estamos pues a un paso de que más personas y no países, se hagan ricas o riquísimas a costa de muchas personas de clase media que teniendo lo mismo, van a poder comprar menos.
Los nuevos ricos serán chinos, indios o de Qatar mientras que los nuevos pobres serán españoles, italiano o argentinos.