En estos días todos hablamos de economía hasta aburrir, incluso los que no hemos terminado Económicas. Ustedes ya saben lo que es el miedo, terrible, pues esa es la palabra clave. Nos atenaza el miedo.
Es cierto que algunos grandes países están en déficit admitido o no, y que la energía sube hasta descontrolarse, y que los riesgos asumidos en algunas operaciones muy importantes son muy altos sobre todo si viene recesión. Pero no estamos en un momento especial de crisis. Todavía.
Si miramos hacia nuestro país, desaparecida la inversión inmobiliaria como recogedor de los dineros y con una fiebre vendedora en Bolsa muy importante, la pregunta sería ¿Y donde piensan poner los dineros los que lo tienen si además no creen en la empresa ni en la investigación?
La varita mágica pasa por dar marcha atrás. Bajar tipos de interés y soportar una inflacción que se controlará algo por otros lados, porque unos tipos altos supone que el dinero se vaya a reductos fijos en vez de variables y a que se pare el consumo, e insuflar en el mercado dinero a espuertas, para que además permita a las países endeudarse algo más sin que se note mucho en la contabilidad. Esto si lo hacen todos no es grave, si lo hacen algunos supone la bajada del cambio de su moneda.
¿Porqué juegan a bolsa los que se creen que aquello es un lugar en donde te garantizan a corto plazo ganar?, la bolsa es para el dinero que sobra, o para el largo plazo.
Si EEUU no estuviera en periodo electoral, y con un Presidente como el que ahora hay, los temores a una desestabilización en América Latina subirían, pero esas trampas ya no se pueden dar.
Que no se nos olvide, que las guerras las pagamos todos a escote.
Es cierto que algunos grandes países están en déficit admitido o no, y que la energía sube hasta descontrolarse, y que los riesgos asumidos en algunas operaciones muy importantes son muy altos sobre todo si viene recesión. Pero no estamos en un momento especial de crisis. Todavía.
Si miramos hacia nuestro país, desaparecida la inversión inmobiliaria como recogedor de los dineros y con una fiebre vendedora en Bolsa muy importante, la pregunta sería ¿Y donde piensan poner los dineros los que lo tienen si además no creen en la empresa ni en la investigación?
La varita mágica pasa por dar marcha atrás. Bajar tipos de interés y soportar una inflacción que se controlará algo por otros lados, porque unos tipos altos supone que el dinero se vaya a reductos fijos en vez de variables y a que se pare el consumo, e insuflar en el mercado dinero a espuertas, para que además permita a las países endeudarse algo más sin que se note mucho en la contabilidad. Esto si lo hacen todos no es grave, si lo hacen algunos supone la bajada del cambio de su moneda.
¿Porqué juegan a bolsa los que se creen que aquello es un lugar en donde te garantizan a corto plazo ganar?, la bolsa es para el dinero que sobra, o para el largo plazo.
Si EEUU no estuviera en periodo electoral, y con un Presidente como el que ahora hay, los temores a una desestabilización en América Latina subirían, pero esas trampas ya no se pueden dar.
Que no se nos olvide, que las guerras las pagamos todos a escote.