31.12.07

2007, un año impredecible

Mi 2007 ha sido un año contrastado, muy contrastado. Lleno de luces que empiezan a brillar, de momentos realmente muy buenos, de lugares y gentes nuevas muy interesantes, de cambio en el rumbo sin duda, pero también de algunas sombras, de tristes melancolías y abandonos.
Conseguir retratar un momento para dejarlo como marca es muy complicado, pero he optado por el de la muerte.
Todo lo demás deja de tener importancia porque se puede volver a intentar, se puede volver a buscar y conquistar. Pero la vida que se escapa, esa ya nunca puede volver a darte sabores, y ver el dolor de los hijos o de la mujer del amigo marcan todavía más su ausencia.
Desde ese ojo abstracto de tu peculiar forma de ver la vida, sé que me observas, José Luis.
Yo también te sigo mirando.