14.6.07

Gazapo

Si, no es ninguna equivocación, es un plato de tamaño normal y contiene un gazapo. Yo no me lo comería nunca, prefiero los conejos más bien grandes y asados a mi manera.
Sobre una bandeja pongo patatas cortadas a láminas al igual que cebolla a modo de cama. Sobre esto deposito el conejo limpio con la piel hacia arriba y lo rocío bien de aceite de oliva, sal y pimienta recién molida. Unas hojitas de romero también recién cortadas son imprescindibles (una maceta dura años).
Para la base mezclo en un vaso mediano agua y brandy a partes iguales y pongo la mitad debajo de la bandeja para cubrir casi las patatas, reservando el resto para rociar la carne según se vaya asando.
A horno muy fuerte meto la bandeja y a los 2 minutos bajo el horno a no más de 170 grados. sobre el 7 en una escala del 1 al 10.
Si se seca le voy añadiendo del vaso, humedad en forma de lluvia.
Pero el asado tranquilo y reposado es la clave. Menos de hora y media nada de nada.
Si se termina de asar antes de tener que servirlo, y una vez que el color es el deseado, se recubre con papel de aluminio para que no pierda humedad y no esté seco.
Como variantes permito a veces una rociada de limón, algo de tomillo, cambiar el brandy por vino tinto y servir salsas tipo ali-oli o algunas algo picantes. Con tinto saldrá la carne más gris, pero si el vino es bueno puede compensar.
Se trata siempre de engañar al comensal y hacerle creer que es conejo de campo, por eso el aroma de las hierbas es fundamental.