Queridos empresarios de Artes Gráficas, ustedes no forman un solo grupo profesional, ni incluso dos, por lo que me va a resultar muy difícil dirigirme a ustedes como colectivo, sin faltar al respeto a los empresarios que se defienden con uñas y dientes de una crisis seria que les amenaza desde hace años y de la que les está costando mucho esfuerzo no morir. Pregunten en los bancos en qué concepto están las Artes Gráficas.
Me refiero principalmente a los de visitas a sus empresas a las 11 de la mañana y dedicación importante a reuniones cuando menos semanales de todo tipo, entierros y juegos deportivos a última hora de la mañana porque es lo que se “lleva” y seriedad en cara para cumplir con su papel de "amo".
El sector está mal, muy atomizado, con una calidad media en su análisis empresarial baja, con una formación de sus empleados baja, con unos sueldos medios más bajos que en otros sectores, bastante endeudado, con pocas posibilidades de exportación y con una renovación empresarial errónea ya que suelen ser los hijos que no han querido estudiar los que continúan con los negocios sin en muchos casos una preparación suficiente, ya que el pequeño o mediano tamaño de las empresas impide esas actuaciones. Y en muchas empresas en donde la formación forma parte de sus inversiones, es precisamente hacia esos hijos únicamente a donde van esos gastos.
Los dirigentes elegantes a nivel estatal del empresariado, son (increíblemente por el número de empresas que hay en las asociaciones) personas que representan a grandes empresas, directa o indirectamente, lo que convierte al pequeño y mediano empresario en meros actores de piedra.
Es vergonzoso por ejemplo que nunca hayan cedido en la actualización de las categorías profesionales, ancladas en los años 60, en donde por ejemplo la figura de escanista (tan importante y técnica), ha durado 25 años y ya ha desaparecido sin que nunca estuviera recogida como categoría profesional en el sector. Como ella hay decenas, pero no me voy a extender por no ponerme nervioso. No, no soy de ningún sindicato querido mal pensado, si acaso del sindicato del sentido común, pero si que he estado en alguna reunión del tema, siempre por la parte empresarial.
¿Cuántos buenos profesionales de nuestro sector se han ido a otros sectores o lo que es peor para sus intereses lógicos pero a veces poco inteligentes, se han montado su propia empresa y les han quitado los que entendían que eran “sus trabajos”?.
No estamos en condiciones de competir con Europa, exportamos en contadas empresas, competimos siempre por precio y nunca por servicio o calidad, hemos ido bajando los precios constantemente a costa de nulas inversiones, sueldos más bajos, formación anulada, y entrega de un producto que comparado con lo que se hacía hace 2 décadas en vergonzoso en muchos casos. Si, las excepciones son siempre grandes empresas, pero en número pequeño para lo que es el sector en su análisis macroeconómico.
Como es ilógico que siga habiendo empresas de tamaño medio/grande, con varias máquinas de tamaño 70x100 y que no tengan ni su propio CTP ni un departamento propio de diseño o de preimpresión, ni densitómetro ni un simple ordenador para abrir los ficheros que les llegan. Yo fui preimpresor y ya se que he desaparecido como tal profesional, por eso y por mi formación, no me afecta la propuesta anterior y la digo con fuerza de la lógica.
No quiero continuar más dando la vara, un abrazo a los empresarios amigos, a todos los que sufren su empresa pero la aman, y un consejo final. No os dejéis manipular por los intereses de unos pocos que son muy grandes. Me refiero a sus intereses. Y aquí incluyo incluso a los grandes proveedores que durante décadas han cobrado precios muy distintos según el tamaño de la empresa, distorsionando y atomizando más el sector. Un abrazo a todos menos a los que no se lo merecen.
Me refiero principalmente a los de visitas a sus empresas a las 11 de la mañana y dedicación importante a reuniones cuando menos semanales de todo tipo, entierros y juegos deportivos a última hora de la mañana porque es lo que se “lleva” y seriedad en cara para cumplir con su papel de "amo".
El sector está mal, muy atomizado, con una calidad media en su análisis empresarial baja, con una formación de sus empleados baja, con unos sueldos medios más bajos que en otros sectores, bastante endeudado, con pocas posibilidades de exportación y con una renovación empresarial errónea ya que suelen ser los hijos que no han querido estudiar los que continúan con los negocios sin en muchos casos una preparación suficiente, ya que el pequeño o mediano tamaño de las empresas impide esas actuaciones. Y en muchas empresas en donde la formación forma parte de sus inversiones, es precisamente hacia esos hijos únicamente a donde van esos gastos.
Los dirigentes elegantes a nivel estatal del empresariado, son (increíblemente por el número de empresas que hay en las asociaciones) personas que representan a grandes empresas, directa o indirectamente, lo que convierte al pequeño y mediano empresario en meros actores de piedra.
Es vergonzoso por ejemplo que nunca hayan cedido en la actualización de las categorías profesionales, ancladas en los años 60, en donde por ejemplo la figura de escanista (tan importante y técnica), ha durado 25 años y ya ha desaparecido sin que nunca estuviera recogida como categoría profesional en el sector. Como ella hay decenas, pero no me voy a extender por no ponerme nervioso. No, no soy de ningún sindicato querido mal pensado, si acaso del sindicato del sentido común, pero si que he estado en alguna reunión del tema, siempre por la parte empresarial.
¿Cuántos buenos profesionales de nuestro sector se han ido a otros sectores o lo que es peor para sus intereses lógicos pero a veces poco inteligentes, se han montado su propia empresa y les han quitado los que entendían que eran “sus trabajos”?.
No estamos en condiciones de competir con Europa, exportamos en contadas empresas, competimos siempre por precio y nunca por servicio o calidad, hemos ido bajando los precios constantemente a costa de nulas inversiones, sueldos más bajos, formación anulada, y entrega de un producto que comparado con lo que se hacía hace 2 décadas en vergonzoso en muchos casos. Si, las excepciones son siempre grandes empresas, pero en número pequeño para lo que es el sector en su análisis macroeconómico.
Como es ilógico que siga habiendo empresas de tamaño medio/grande, con varias máquinas de tamaño 70x100 y que no tengan ni su propio CTP ni un departamento propio de diseño o de preimpresión, ni densitómetro ni un simple ordenador para abrir los ficheros que les llegan. Yo fui preimpresor y ya se que he desaparecido como tal profesional, por eso y por mi formación, no me afecta la propuesta anterior y la digo con fuerza de la lógica.
No quiero continuar más dando la vara, un abrazo a los empresarios amigos, a todos los que sufren su empresa pero la aman, y un consejo final. No os dejéis manipular por los intereses de unos pocos que son muy grandes. Me refiero a sus intereses. Y aquí incluyo incluso a los grandes proveedores que durante décadas han cobrado precios muy distintos según el tamaño de la empresa, distorsionando y atomizando más el sector. Un abrazo a todos menos a los que no se lo merecen.