4.1.25

No manipules a tu pareja o se romperá la relación

¿Quieres controlar y dominar a los demás?, ¿quieres dominar a tu pareja, que sea dependiente de ti?, pues te voy a dar unos consejos, pero cuidado. Todos son ellos son asquerosos, violentos, algunos ilegales, y te van a llevar al hundimiento.

Dominar puede suponer que los otros se rebelen e intenten dominarte a ti, volviéndose contra tus actos, puede suponer que tras estas prácticas erróneas surjan la dependencia y la pelea, el divorcio y la desafección. La ruptura. Todos tenemos derecho a defendernos, y contra cada acción, siempre hay una reacción.

 Puede chillar y gritar, levantar la voz más que tu interlocutor. Creer que quien más fuerte grita es el que tiene más razón.

 Puedes amenazar con irte de casa, con divorciarte. 

 Puedes conseguir que el otro tenga sentimientos de culpa, que no te entienda, que no te comprenda. 

 Puedes emplear la ira y lanzar palabras violentas o incluso objetos contra el interlocutor. 

 Puedes golpear cosas. Incluso golpearte tú mismo.

 Puedes incluso enfermar de verdad para dar lástima de forma psicosomática, con síntomas reales que sin querer enmascaran la realidad, atontan a quien te observa. 

 Puedes no hablar más, esconderte en el silencio, callarte y no opinar. Se llama ghosting.

 Puedes llorar muchas veces al día, con razón o sin ella, pero llorar delante de los demás para dar lástima. 

 Puedes abandonar a tu cónyuge sin motivo real y serio unas horas y luego volver. 

 Puedes acusarle de que no te quiere, de que no lo quieres ya, para que se pliegue a tus deseos. 

 Puedes incluso amenazar con el suicidio, con desaparecer, con el dolor máximo.

Emplees lo que hablamos arriba u otras acciones similares, estarás manipulando a tu pareja, estarás jugando en el límite de la ruptura. ¿Es eso lo que buscas? Recuerda que te tratarán casi igual a como tú trates a los demás, a tu pareja, a tus compañeros de vida.

Ejercicio literario para crear un texto que no sea mediocre

Vamos a realizar un ejercicio literario que considerarás contrario a todo sentido, a toda forma de aprender y practicar literatura. Vamos a realizar un relato malo de solemnidad, absurdo e incluso asqueroso si quieres.

Haz el relato sabiendo que quiere hacer un relato corto y malo. 

No le pongas un comienzo interesante, crea una historia absurda con un personaje bobo y soso. 

Llénalo de tópicos que has escuchado en la calle, muchos adjetivos que no vengan al caso, lleno de adverbios superlativos, que no tenga desarrollo ni nos lleva a ningún sitio, con un  final inesperado por no tener ni pies ni cabeza (así me gusta, con tópicos, con frases hechas). 

Intenta dejarlo lleno de reflexiones filosóficas propias, a ser posible sin contrastar. Llénalo de sinónimos rebuscados y de frases complejas de leer. Corrígelo para empeorarlo a conciencia. Y revisa el final del texto.

Es posible que si lo has hecho tan mal como comentamos, o al menos como nos imaginamos todos que lo has intentado, te haya quedado un texto curioso. 

Si has logrado que no sea mediocre, que sea realmente malo de verdad, no te quepa duda, habrás realizado un texto que gustará a algunas personas. Falta ahora encontrar a los lectores, pues los hay, sin duda. 

Lo peor de un escrito es que sea mediocre. Si es de verdad malo, es mucho mejor que un texto mediocre.